Horas Joánicas Lucas 15:11-23 Agosto 1996 _____________________________________________________________________ [Las "horas joánicas" son propuestas para sostener la bùsqueda de Dios en el silencio y la oración. Se trata de dedicar dos o tres horas para leer en silencio los textos bíblicos que se sugieren y que van acompañados de un breve comentario y algunas preguntas. Más tarde, reunidos en pequeños grupos en casa de uno de los participantes, se comparte brevemente lo que cada uno cree haber descubierto, pudiendo eventualmente finalizar el encuentro con un tiempo de oración.] Lucas 15.11-23 ¿ Qué puede ser más cruel para unos padres que verse renegados por su hijo amado, ignorados por un corazón que no ve en ellos sino los proveedores de un bienestar material? ¿Qué prueba más desgarradora ver la autodestrucción de su hijo, su perdición, sin poder hacer nada para protegerle de sí mismo? Si el padre de la parábola puede superar ese misterio del sufrimiento, sin que su amor por el hijo se vea mermado, y si puede guardar sus fuerzas para acoger a su hijo al primer indicio de apertura, es porque en todo momento ha mantenido su mirada en él. No tiene en cuenta ni la humillación padecida ni su sufrimiento. No mide ni la distancia, ni el tiempo perdido, ni aquello que ha sido destruido. Ni siquiera se detiene en los sufrimientos de su hijo o en las amenazas que planean sobre él. Esto no conseguiría sino aumentar su angustia. Desde siempre ha creído que su hijo merece la libertad que busca al precio de tantas errancias. No será la falta del hijo la que debilitará la resolución del padre. Contra toda evidencia, contra toda inquietud, continùa creyendo en él. Sabe que su hijo reconocerá ese corazón abierto y que en él encontrará descanso. El sabe que el amor dado le permitirá, un día, descubrir el verdadero rostro de su bùsqueda y transfigurar toda su vida. Entonces la libertad no será solamente la libertad inicial a elegir sino la libertad fecunda de quien se da, ampliando su propia vida al horizonte de una comunión. La fidelidad de uno basta para los dos. A su regreso, muy pocas palabras: ni explicación, ni lección. Solamente la alegría del padre, libre a su vez para hacer pùblico el secreto de su vida: dar permite superarlo todo y curarlo todo. ¿Para qué persona, en qué situación, debo tener en cuenta la mirada del padre, para poder estar alerta hasta que llegue el día en que el perdón será reconocido? ¿Qué gestos, qué fiestas inventar en lo cotidiano para decir y compartir la alegría del perdón? "Johannine Hours" - 08/96 - ©71250 Taizé-Community, France. taize@cpe.ipl.fr ------------------------------------------------------ file: /pub/resources/text/taize/espanola: jhs-9608.txt .